ADAN ET EVA SUB MENSA

By Damien Hirst Galeria Hilario Galeguera 2006 tengo la idea de que el arte que mas nos impacta de manera individual es aquel que que se conecta con alguna momento de nuestras vidas.

La primera vez que la vi mi vida estaba en shock, pasando por cambios algunos dolorosos otros necesarios. Creo que el primer vistazo mi mente lo bloqueo, pero después viendo con detalle poco a poco me invadía el vértigo, finalmente cuando vi los anillos entre lazados entendí todo. Al entrar a la galería y ver la paloma congelada en aquella vitrina de formol me sentí hechizada, todas esas imágenes tenían muchos significados que iban y venían en mi cabeza entonces al girar a la derecha vi una habitación pintada de negro vi la mancha negra que sobre salía me costo trabajo dar el primer paso hacia dentro, me dio dos segundos de ese miedo infantil. Seguía hechizada la verdad ese día me entere de que Hirst existía

Vi al tiburón y las ovejas, y casi al fondo la vi tuve que acercarme para entender de que se trataba, mire hacia abajo, los esqueletos son reales me comento mi primo. Si eran reales, vi todo lo que sobre la mesa,

el dijo algo ya no lo podía escuchar estaba concentrada viendo a los esqueletos los detalles del vestido la tierra en los craneos , la solapa del traje... entonces les vi las esqueléticas manos los anillos entrelazados que los unían. Me falto el aire, la piernas me temblaron ligeramente, aprete los dientes yo sabia quienes eran. Yo los veía unidos claramente por ese anillo. Sin importar que hubiera arriba de la mesa lesivo enredante trágico. No necesitaba que lo confirmara pero lo hizo, de hecho hice mucho para contenerme, ¿los ves? ¿Ves ahí a tus papas? Ahí están. (NAH!!! ENSERIO YA CALLATE) solo lo pensé lo demás lo vi sin relevancia me contó cosas sobre el artista. Me dejo en la esquina de mi calle le di las gracias y sonreí esa forzada sonrisa de dejame ir. me baje camine se arranco el coche, corrí, vi pasar mi casa corrí, vi la tienda el parque los arboles y corrí corrí seguía corriendo para no gritar, para no romper en un infantil llanto.

Hirst vuelve a la ciudad y me entere antes de la inauguración pero hoy es 24 de mayo y no e ido aun, ha dejado atrás las peceras de formol vuelve a la pintura, quiero ir, pero no me atrevo a ir sola, es mera coincidencia pero este momento de mi vida es cambiante como aquel 2006 que me encontré con Adan y Eva debajo de la mesa.